La isla de una cocina es una encimera de la misma desde la cual se puede acceder desde todos sus lados, de ahí el nombre de isla de cocina. Según su configuración, puede servir como un espacio más de almacenaje o como una extensión de la propia cocina.
La isla de cocina puede servir de recibir de invitados u office, así como para preparar alimentos o cocinar.
El espacio óptimo para poder añadir una isla a la cocina y que esta quede bien proporcionada en función de las dimensiones debe ser 15 m² para cocinas cerradas y 20 m² para cocinas abiertas.
Las ventajas que puede aportar una cocina con isla son las siguientes: